La Naturaleza en la Sauvageonne es tan salvaje como generosa. El terroir se divide entre los famosos suelos de Ruffes y zonas de areniscas y esquistos fonolíticos (las piedras que cantan).
Cada variedad ha podido ser plantada en el suelo propicio para su mejor expresión. Las amplitudes térmicas del verano ralentizan la maduración de las bayas y garantizan a los vinos una precisión aromática notable.
Cada variedad juega sus mejores acordes, lo que nos permite crear ensamblajes inéditos para sublimar su expresión. Al final, la Sauvageonne ofrece vinos inquietantes, sensuales y elegantes.
El Gran Vino blanco resulta de la mezcla de Grenache Blanc, Vermentino, Roussanne y Viognier, todos provenientes de terroirs de esquisto. El Grenache Blanc se vinifica en tanque y las otras tres variedades en barricas.
El rosado La Villa es un ensamblaje iconoclasta, resultado de la co-fermentación de variedades negras y blancas: Grenache, Viognier, Vermentino y Mourvèdre.
El Gran Vino rojo es la unión de corazón y espíritu de la variedad mayoritaria Grenache Noir mezclada con Syrah, Mourvèdre y Carignan, provenientes de los terroirs de esquistos y Ruffes. La alianza de estos caracteres tan diferentes y complementarios revela una complejidad aromática y una suavidad de textura inigualables.